Punto de Teocelo

Espacio 13

Sentimiento, nobleza y recuerdos…

De Fernando Charleston en su barrio.

Es amigo de mis hijos desde chamacos, dijeron.  

 “Lo que se les de a los niños…los niños darán a la sociedad”.

Alfonso Mora Chama

Bastaron solamente unas cuantas viviendas de recorrido, para que a Fernando Charleston Hernández, sus vecinos de antaño le acordaran su época de niño y fue agradable escuchar a la gente expresarse de quien ahora regresó a ellos como candidato, con responsabilidad que la acepta con orgullo, con un prestigio y personalidad de funcionario recto y honorable…con esa formación que cuajó con honradez y honestidad que predicaron y siguen predicando sus padres…Fernando el Magistrado y doña Mercedes…y sus propios amigos de la infancia lo recibieron con cariño, emoción y sentimiento…

    Una señora, de los López Mora, prima mía por cierto…le dijo: “ya estaba molesta porque no visitabas tu barrio, mira aquí está uno de mis hijos que jugaba contigo…”. El abrazo entre los dos amigos de la infancia…Fernando continuaba caminando.  Hemos tratado y convivido con infinidad de candidatos, muy de cerca en giras al gobierno de Veracruz, como don Rafael Hernández Ochoa, don Agustín Acosta Lagunes, don Fernando Gutiérrez Barrios y uno de los últimos que incluso visitó la casa que habitaba mi señora madre en Teocelo, doña Conchita que en paz descansa, lo llevamos a esa casa de 5 de mayo número 4 para saludarla…Miguel Alemán Velasco…

       Con otros en diferentes niveles, a diputaciones locales, digamos al “Vaselinas” dirigente de la CTM estatal,  los que imponía el “Gordo” Manuel Meza Hernández, a quien tratamos a través de la amistad de mi mamacita y la señora del líder estatal de la CTM, doña Eufrosina que vivía en la calle de Lucio en Xalapa…al profesor Adán Córdoba…muchos que fueron grises y sin aportación alguna, en las curules  federales a don Daniel Nogueira Huerta, Sebastián Guzmán Cabrera, otros de sindicatos poderosos que habían tomado este distrito electoral federal, como nido de huevones cobrando en el Congreso de la Unión…Hermenegildo J. Aldana, de la petrolera Minatitlán…otro claro ejemplo…

   Pero ningún candidato tan joven y capaz, con esos ojos de águila que los deposita para ver y saber quien le quiere tomar el pelo…diferente en su manera de organizar su campaña, de enviar su mensaje que abre criterios y los deja para el análisis…criticado por darle oportunidad a un puñado de jóvenes, como la misma oportunidad se la dio don Rafael Hernández Ochoa a los chavos de los años de su sexenio allá por el 74 dándole chance a Miguel Angel Yunes Linares, Gonzalo Morgado Huesca, Juan Herrera Marín, Daniel Hernández León, Edel Alvarez Peña, madurando a un Alfonso Luna Alfeirán…Evaristo Morales Huertas ahora en las filas con Memo Zúñiga Martínez…

   Fernando Charleston sabía  que al visitar a sus vecinos de antaño, quizás le reclamarían su alejamiento de años, cuando todos sabemos que obligado por las circunstancias de estudiar y superarse en el Distrito Federal, tuvo que abandonar la tranquilidad y dejar de percibir ese delicioso aroma de la flor del café, del naranjo y entregarse al estudio universitario que ahora le da esa capacidad y oportunidad de demostrar que Coatepec tiene candidato de lujo, de experiencia a pesar de sus 35 años y seguramente así se desempeñará en la Cámara Baja del Congreso de la Unión…

   Pero su gente del barrio 20 de noviembre, de Bravo, de la plebe del futbol en la cascarita del Seguro Social, no se lo tomaron a mal…reconocen su entrega y su honestidad para estar de lleno en una campaña que la toma con esa responsabilidad que la deposita todos los días cuando muy de mañana sale a visitar comunidades más apartadas del distrito, así sean de pocos habitantes, pero para Fernando Charleston todos tienen importancia y merecen respeto en su calidad de seres humanos, sin importar la humildad o la apariencia social, por desgracia en clasificaciones…

   Tenemos un magnifico candidato.

No hablamos por ese servilismo que acaba con la personalidad de los grandes.

     Lo hacemos con conocimiento de causa, a nuestros 42 años de ejercicio periodístico a cumplir el próximo 13 de junio, en los cuales hemos vivido y sufrido para decirle a nuestros cuatro hijos y siete nietos, que les heredamos eso que Fernando Charleston también mamó de niño: honestidad, honradez y sencillez.

    Con esa atención a los humildes, a los marginados, a los olvidados de la justicia, de los gobiernos y de las instituciones de salud, de educación y del desempleo…seguiremos sirviendo a la gente y enarbolando la bandera del profesionalismo para ejercer esta labor en la cual nos tratan como limosneros, mal pagada, poco entendida pero tan llena de satisfacciones y de orgullo que no la cambiaríamos por nada del mundo…

   Prensa y política….políticos y periodistas siempre tendremos que ir de la mano.

    Vimos a un Fernando Charleston…jovial y noble. Con calor de sol quemante y calor de su gente…Por su barrio, en el lugar de siempre, en la misma ciudad y con la misma gente…diría la canción de Juanga…

    Todo esto se gana…nada es gratuito.